Page 603 - TU MENTOR EN EL MERCADO

TU MENTOR EN EL MERCADO | 599

los actos. El mundo está lleno de personas con amplios conocimientos,
pero inactivas. Lo singular de la gente exitosa es que, a diferencia de la
mayor parte del público, actúa. Su éxito, su poder de controlar su propio
futuro deriva de la acumulación de conocimiento y actuación.

Si quiere triunfar, utilice los conocimientos de otras personas e imite
a los que tienen éxito. Ni siquiera es necesario tener una idea original.
¿Steve Jobs inventó la interfaz gráfica de Apple, el ratón o el iPad? No.
Él tomó ideas que ya existían y las mejoró a un nivel de perfección tal
que creó un mercado totalmente nuevo. Él afinó las soluciones y pasó a
actuar. Bill Gates tampoco inventó el sistema DOS que lo hizo tan rico,
sino que se lo compró a un inventor que no se había dado cuenta de su
potencial inherente.

Un modelo a seguir

Para tener éxito no hay que reinventar la rueda. Encuentre un modelo
que funcione y cópielo. No le estoy sugiriendo que renuncie a ser el
próximo inventor de una puntocom. Simplemente estoy tratando de
ser práctico. Gracias a la experiencia de décadas de actividad en los
negocios, he aprendido que las probabilidades de éxito son mayores
cuando se imitan y mejoran productos, conocimientos y métodos que
ya existen. Durante la época de la burbuja de las puntocom, fracasé en
mis esfuerzos por inventar productos y servicios que yo estaba seguro
de que iban a cambiar el mundo. Pero sí tuve éxito mejorando ideas y
productos existentes. Tampoco inventé el day trading, pero fui el primero
en convertirlo en un modelo para escuelas y firmas de brókeres que
operan en varios países fuera de Estados Unidos. Este fue un modelo
exitoso que yo inicié y en el que no tuve que invertir mi propio capital.
Aporté conocimiento e iniciativa empresarial y conseguí los fondos
de inversores. Mi vida no ha sido una de puros éxitos. He pasado por
a­ lgunos fracasos duros, pero siempre mantuve una cosa en mente: si no
lo intento, no lo lograré.

El éxito no tiene por qué seguir un modelo de alcance mundial como
Facebook. Si a una empresa le está yendo muy bien en Los Ángeles,
no hay motivo para que no le vaya bien en San Diego. Le sugiero que