Page 574 - TU MENTOR EN EL MERCADO
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570 | 14 - ¡Ahí vienen los demonios!
9. Solo invierto a largo plazo.
La inversión a largo plazo demostró su eficacia durante muchos años,
pero es cada vez más difícil de mantener. En la época de nuestros padres,
uno podía comprar acciones de IBM, por ejemplo, ponerlas debajo de
la almohada (¡así es, en ese entonces se le entregaba al comprador un
certificado real de papel grueso!), irse a dormir, despertar al día siguiente
y saber que todo seguía estando bien. Esos tiempos ya se han ido. No
me opongo a la inversión a largo plazo, especialmente si el método le
funciona pero, por lo menos, diversifique su cartera de inversiones con
alguna actividad a corto plazo.
10. Es culpa del mercado.
Es muy fácil culpar al mercado: no me enseñaron bien, me prometieron
millones, el piso está resbaladizo, se sabe que la bolsa es un lugar ingrato…
y más. No todo el mundo es apto para el trading intradía y el mercado
no le va bien a todo el mundo. Para cerrar este capítulo, permítame citar
a John Burroughs:
“Un hombre puede fracasar muchas veces, pero no es un fracaso mientras
no empiece a culpar a otro”.
